“Menestra de cuaresma”, La vida contemporánea, en La Ilustración Artística, nº 1.106, 9 de marzo de 1903.
En este artículo doña Emilia escribe lo siguiente sobre la “prostitución”:
“Es tanto lo que acerca de este capítulo se podría decir, que vale más no empezar siquiera, y limitarse á afirmar que la blancura se corrige con baños de tinta, ¡con lo mismo que se corregirían tantas cosas!
Instrucción, instrucción, instrucción, equidad, equidad, libertad, acceso á todo; que la mujer pueda hacer cuanto la permitan sus facultades, sin tropezar en preocupaciones ni en caprichosas trabas.”